“Soy joven. Soy CaPAZ” bajo este lema, el programa CaPAZ realizó su lanzamiento regional el pasado 17 de marzo. Ante un público de 107 participantes de diferentes países de Centroamérica y Alemania, el programa presentó su oferta de servicios para la cooperación técnica, en un evento virtual que contó con la participación de representantes institucionales de diversos ámbitos y países.

CaPAZ, cuyo nombre oficial es Promoción del Empleo Juvenil, de la Formación y de la Capacitación para Jóvenes Marginados para Contribuir a la Prevención de la Violencia Juvenil en Centroamérica, tiene una duración prevista de tres años, desde enero de 2020 hasta diciembre de 2022. El programa será implementado a nivel territorial en 11 municipios seleccionados de Guatemala, Honduras y El Salvador. El objetivo principal es contribuir a la mejora de la resiliencia social y la empleabilidad de jóvenes. De esta forma, se contribuirá a prevenir la violencia en los municipios donde se implementa el programa y que en los últimos años han registrado altas tasas de hechos delictivos.

Durante el evento, se organizó un foro de discusión con representantes de instituciones públicas como ministerios y municipalidades de los países centroamericanos, incluyendo países que no participan directamente en la implementación del programa. Adicionalmente, se organizó un segundo foro para conocer la perspectiva de diferentes actores del nivel local incluyendo a jóvenes, quienes serán los beneficiarios del programa.

En palabras de la directora del programa CaPAZ, Felicitas Eser: “Nosotros como GIZ, nuestra contraparte regional, la SISCA, las municipalidades y nuestras ONG socias, estamos convencidos, ya es tiempo de cambiar. Tiempo de dejar de pensar que como adultos lo sabemos todo, que los jóvenes sólo causan problemas porque en la juventud está el potencial, ahí están las ideas, las fuerzas, la esperanza, ahí está el desarrollo de Centroamérica”.

A nivel regional, CaPAZ trabajará con la Secretaría de la Inclusión Social Centroamericana – SISCA, con la cual se conduce un proceso para la gestión del conocimiento con los países que conforman la así denominada región SICA. De este modo, se fomentará el intercambio de experiencias y buenas prácticas para la inclusión social de grupos que viven en contextos vulnerables.